La alimentación se ha convertido en un lujo para la mayoría de la población incluyendo a los deportistas élite de Venezuela ¿Qué realidad enfrentan los deportistas y cuales son las alternativas viables?
Según el Centro de Documentación y Análisis para los Trabajadores (Cenda) , el sueldo mínimo (18,300 bs) de un venezolano solo cubre el 3% de los 60 productos de consumo que comprende la canasta básica. El deporte venezolano intenta mantenerse en pie gracias a los atletas que dejan todo en la cancha y afuera de ella.
Edimar Luque, atleta élite venezolana de la categoría Stand Up Paddle Race, nos recibe en el quiosco que atiende frente a su casa los fines de semana en el pueblo de Care, Estado Vargas. A simple vista parece una persona normal hasta que sale de la barra y deja ver sus piernas perfectamente tonificadas que demuestran que realmente entrena.
Durante los últimos meses asistió a dos competencias: Los Juegos Suramericanos de Playa y a Los Panamericanos, regresó con medallas de cobre y bronce, sin embargo no cuenta con un patrocinador fijo.
Armando Colucci inicia su día en el Instituto Nacional de Deporte en donde Lucas Castellanos, entrenador y ex atleta lo guía. Colucci alterna rutinas y entrena dos veces al día: inicia corriendo 5km en la caminadora, luego pesas y funcionales. Su agenda de ejercicio comprende 4 días a la semana de gimnasio y tres días en el agua haciendo paddle surf y si no hay ola pues distancia con remo.
Alternativas para ganar
Para Luque y todos los atletas en Venezuela entrenar ha sido una búsqueda de alternativas para estar en la élite. “Como ves trabajo en este quiosco y me da la proteína que no tengo en la casa”. Busca alternativas a lo que son los vegetales por la falta de proteína, pescado, el relleno de empanadas ya que la hepatitis que padeció hace 6 meses la dejo muy limitada en relación al consumo de granos (la proteína más accesible en el mercado venezolano).
“Ahora todo tiene un porqué y un para qué, ahora el deporte es menos pragmático y más empírico” afirma Armando Colucci, selección Nacional desde hace más de 10 años en categorías como longboard, paddle surf, kneeboard y otras disciplinas”.
Nutrición deportiva
Según la nutricionista María Verónica Gómez, profesora de la Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad de Los Andes (ULA) “Los deportistas de registro y marca (atletismo y natación) tienen una rutina de alimentación rica en carbohidratos, diseñada para generar energía efectiva.
Los requerimientos energéticos de un deportista son muy elevados, su gasto calórico comúnmente está por encima de las 3500 kcal al día”. Es decir para las calorías que queman estos atletas en sus entrenamientos diarios Edimar apenas cubre sus requerimientos, Armando está dentro de lo recomendable apenas.
Según Vicente Villanova, atleta y creador de Once fit un circuito funcional de alto rendimiento en Panamá, explica la clave para tener frutos en el entrenamiento: “Lo que como, cuando lo como y el descanso” compartió en uno de sus post.
Bocado a bocado, día a día
Edimar Luque tiene una rutina activa, consiste en un desayuno ligero de un cambur y agua para correr 3km, luego arroz o pasta del día anterior para poder entrar al agua a remar. Las distancias varían: puede recorrer 5km hasta 18km desde Care hasta los Caracas y de vuelta. Después desayuna una arepa y descansa hasta el mediodía en el que almuerza arroz o pasta siempre buscando la proteína más accesible que usualmente suele ser huevo. La cena de Edimar comprende harinas mayormente, una arepa de nuevo o lo sobrante del almuerzo.
Luego del primer entrenamiento Armando Colucci come sus dos arepas rellenas de huevo, queso o jamón y descansa para prepararse para la segunda fase del día. Almuerza un plato rico en proteína que intenta que sea pollo, arroz, plátano e incluye los vegetales que tenga. Dependiendo de qué día sea, de la intensidad del ejercicio previo que realizó complementa el acondicionamiento de la mañana con yoga, trota o sube el Ávila y merienda con alguna fruta: cambur, mandarina, melón, etc o avena de nuevo. Su cena suele basarse en alimentos no tan pesados. Ingiere aminoácidos y vitaminas en fechas específicas para rendir más en la competencia y no desgastar su organismo.
¿Generación de Oro?
Desde 2014 nuestros puestos en el ranking empezaron a bajar ligeramente, desde ese año hasta ahora hemos bajado más de 10 puestos en el top mundial de países en la élite deportiva. Ser parte de la generación de oro no es tan sencillo como las selecciones de otros países.
“Ser un deportista es difícil, es duro que nos entiendan. Para un atleta de alto rendimiento el afán es tan grande de llegar a querer una medalla de oro, sobretodo olímpica, que dejas todo: a tu familia tus comodidades, te vas y agarras tus macundales sitios en donde no sabes que va a pasar. No sabes cómo te va a tratar la gente, aprendes a ser humilde, a adaptarte a otras personas, a convivir. Si no te gusta algo lo ves de una manera positiva y no vives en amargura. Eso es ser atleta, dejas todo por esa medalla” Afirma Edimar.
El hecho es que ejercer cualquier profesión en Venezuela se ha convertido en una misión imposible, los resultados de los atletas se han visto afectados por consustancialidades de las cuales no tienen ningún control pero ganar sigue siendo la meta por ello soportan el «journey».
¿Cuáles son las alternativas? Patrocinadores, entrenamiento afuera del país, capacidad de adaptabilidad a los cambios. El hecho es que perder no es una de ellas y el deporte sigue en pie, en remo, en cada remada a la excelencia por más difícil que resulte.
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